Fueron 2.168 metros cuadrados de impermeabilización entre las cuatro torres atendidas: El Pao, El Guayabo, Capatárida y Barbacoa del conjunto residencial Ciudadela Faría.
Concluidos y oficialmente entregados los trabajos de impermeabilización ejecutados por la Alcaldía de Maracaibo, a través del Instituto Municipal de la Vivienda (IVIMA), en cuatro edificios del conjunto residencial Ciudadela Faría, ubicado en la parroquia Idelfonso Vásquez.
El proyecto iniciado en julio del 2024 por el alcalde, Rafael Ramírez Colina, abarcó la remoción de mantos y pendientes existentes, colocación de pendientes y mantos nuevos, y la aplicación de pintura aluminizada en las azoteas de cuatro torres: El Pao, El Guayabo, Capatárida y Barbacoa. Así lo señaló Adrián Romero Martínez, alcalde encargado de Maracaibo.
“Esta y muchas otras obras son posibles gracias a los marabinos comprometidos que cumplen con sus obligaciones fiscales. Los impuestos municipales son el motor que impulsa el progreso en nuestra ciudad”, señaló Romero.
Por su parte, Hugo Morales, presidente del IVIMA, aportó que entre los cuatro edificios ejecutaron un total de 2 mil 168 metros cuadrados de impermeabilización para el beneficio de más de 364 residentes repartidos en 112 apartamentos.
«Hoy, al conmemorar el 66 aniversario del Instituto Municipal de la Vivienda, no hay mejor forma de celebrarlo que entregando esta obra crucial que mejora la calidad de vida de más de 300 personas», afirmó Morales.
Además, enfatizó el compromiso continuo del Instituto Municipal de Vivienda: «Nuestra labor no se detiene; tenemos una agenda ambiciosa para 2025 que nos permitirá intensificar el trabajo realizado durante 2024«.
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Filomena Medina, educadora de 63 años, señaló que mancomunadamente ella y sus vecinos emprendieron la labor de reacondicionar sus azoteas por cuenta propia, ya que su residencia había estado lidiando con filtraciones y goteras que amenazaban la integridad de sus viviendas. Sin embargo, los recursos con los que contaban no alcanzaron para completar la obra.
“Cuando hay problemas en la azotea, todo el edificio se ve afectado. Esta ayuda es inmensa para nosotros; nosotros arreglamos tres alas, pero nos faltaba una y ya no teníamos recursos. La llegada de la Alcaldía ha sido una solución vital«.
Por su parte, Patricia Barajas, licenciada en contaduría pública de 63 años, resaltó la positiva respuesta de los entes municipales ante su solicitud de apoyo: “Estoy muy contenta con el trabajo realizado. La atención en la oficina de DARU fue excepcional, y todos estamos agradecidos por esta obra. Vemos la reciprocidad en el pago de los servicios y el beneficio directo para nuestra comunidad. Esto nos motiva a seguir cumpliendo con nuestras obligaciones y a apoyar el esfuerzo continuo por mejorar nuestra ciudad”.
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