Los trabajos realizados a través del plan Cocinado Seguro beneficiarán al personal docente, administrativo y a los 762 alumnos de la Escuela 1er de Mayo de la parroquia Venancio Pulgar
La Alcaldía de Maracaibo, a través del Servicio Autónomo para el Suministro de Gas (SAGAS) continúa optimizando las cocinas de las unidades educativas del municipio con su programa Cocinado Seguro, en esta oportunidad intervino la Escuela Estatal 1er de Mayo, ubicada en la calle 64 entre las avenidas 98 y 99, Barrio Obrero, parroquia Venancio Pulgar.
Los trabajos consistieron en una acometida de gas completa desde el exterior del colegio hasta el interior de la cocina, la entrega de un reverbero de tres hornillas completamente nuevo y la donación de utensilios de cocina. Así lo detalló Oscar Zerpa, director del SAGAS.
“Este esfuerzo permitirá a las cocineras del colegio preparar comidas de manera más eficiente y segura. La nueva instalación de gas promete mejorar la calidad y la cantidad de las comidas servidas, asegurando que cada estudiante reciba una alimentación adecuada durante su jornada escolar, señaló Zerpa.
El alcalde, Rafael Ramírez Colina, visitó las instalaciones del plantel en compañía de la primera dama de Maracaibo, Vanessa Linares de Ramírez, y les dedicó a los niños unas palabras:
“Nosotros vinimos aquí a su escuela con la intención de ayudarles con nuestro programa Cocinando Seguro a mejorar las instalaciones de la cocina para que así las cocineras les puedan seguir preparando ricos alimentos y ustedes puedan comer tranquilos todos los días y seguir estudiando”.
El personal docente y administrativo del colegio Primero de Mayo expresó su agradecimiento por esta mejora, que según comentaron, tendrá un impacto positivo en la vida diaria de los estudiantes.
María Ollares, directora de la unidad educativa, explicó que desde hace aproximadamente 6 años presentan problemas con la red de gas. “En la escuela realizamos dos comidas diarias, una para los alumnos de la mañana y otra para los de la tarde. Sólo contábamos con dos reverberos y una bombona pequeña que no nos daba abasto y no podíamos comprar una de las grandes porque después no teníamos donde irla a llenar. Teníamos que pedir colaboración a los representantes para llenar la bombona cada cada dos días”, contó Ollares, quien además agradeció la labor de los obreros del SAGAS y del Alcalde, Rafael Ramírez.
“De verdad me siento muy contenta y agradecida con este beneficio que nos ha brindado la Alcaldía. Ahora nuestro personal contará con las instalaciones de gas necesarias para preparar comidas seguras y nutritivas para nuestros 762 alumnos de primaria y educación inicial», concluyó.
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